lunes, 1 de agosto de 2011

La Guardia Civil cuenta con apenas tres coches-patrulla en la zona rural

diariodejerez.es

La Benemérita sí ha montado un servicio especial para prevenir los robos en las fincas especialmente los de cobre, pero está escasa de personal. El 092 mantiene presencia fija alternativa en las localidades
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Guardias civiles y policías locales, durante un operativo especial en Guadalcacín. / Pascual
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La grave paliza sufrida por un joven en El Torno y los robos con fuerza cometidos últimamente en viviendas de Guadalcacín han vuelto a causar inquietud a numerosos habitantes de la zona rural de Jerez, aunque los alcaldes pedáneos consultados por este medio señalan que la situación de inseguridad no es tan alarmante como ha ocurrido en otras ocasiones. Desde la Guardia Civil se asume que su dispositivo es escaso este verano: pueden disponer de unas tres patrullas dedicadas a seguridad ciudadana entre las unidades del puesto principal de Jerez y el de La Barca.
La Benemérita intenta paliar el déficit de efectivos recurriendo a  unidades de intervención adscritas a la Comandancia de Cádiz que realizan controles de verificación de personas y vehículos. Además, con los efectivos disponibles en Jerez se ha montado un servicio especial para prevenir los robos en fincas tanto de maquinaria como de cables de cobre y de cosechas, aunque estos agentes echan una mano también al resto de sus compañeros. En los pueblos llaman a estos agentes “los boinas” por su atuendo.  Vecinos y agricultores señalan que este operativo ha permitido disminuir este tipo de robos, pero probablemente haya provocado que los delincuentes que estén todavía en libertad estén cometiendo delitos en las localidades de la zona rural, aunque se puntualiza que no existe una alarma generalizada como la que provocaron los robos en fincas e instalaciones eléctricas.
La Policía Local es la otra fuerza competente en la zona rural. Su dispositivo cambió al pasarse del sistema de rondas de patrulla a  una presencia fija, pero alternativa —no hay policías todos los días— en las diferentes pedanías. El alcalde de El Torno, Miguel Ángel Morales, explicó ayer que “nosotros estamos medianamente satisfechos. Se echa de menos más presencia policial cuando se hacen ferias y verbenas en los pueblos, aunque en la pasada Feria se reforzó el servicio, pero es necesario más personal. Durante el resto de la semana es una pareja de Policía Local la que viene tres días, bien por la tarde bien por la mañana. Luego los de San Isidro se pasan y se dan una vuelta, al igual que los de la Barca o de Torrecera; yo no me puedo quejar pero hay quejas en otros sitios. La Guardia Civil de La Barca da vueltas, sobre todo de noche”.
La recién constituida Mesa de Seguridad de la zona rural ha planteado elaborar un estudio sobre cómo mejorar los dispositivos, teniendo en cuenta los medios de que se dispone en la actualidad. Desde Benemérita y Policía Local se asume que son escasos. En este punto, la alcaldesa, María José García-Pelayo, ha hecho especial hincapié en la necesidad de trabajar de forma coordinada entre las dos fuerzas de seguridad con presencia en el medio rural; aunque el Cuerpo Nacional de Policía (CNP) cubre otra parte de ésta. La autopista divide la demarcación a cargo de uno y otro cuerpo estatal. El CNP sí tiene más efectivos que el resto de fuerzas de seguridad, pero sus sindicatos indican que carecen de vehículos adecuados para intervenir en zonas rurales, como se puso de manifiesto en las inundaciones de 2010.

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