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Las obras de la A-2003, que une La Barca con Jerez, están paralizadas de nuevo y "no se retomarán hasta marzo o abril"
A.Villegas / Jerez | Actualizado 15.11.2011 - 07:02 
El alcalde de La Barca ya avisa de que están dispuestos a plantear movilizaciones. / Vanesa Lobo
Las señales para indicar la obra continúan en la carretera, aunque no se ven máquinas en movimiento ni operarios en la zona. / Vanesa Lobo
El mal estado del asfalto es evidente, tal como se aprecia en esta imagen. / Vanesa Lobo
Lo de la carretera de La Barca va camino de convertirse en una historia interminable y en una pesadilla para los vecinos de Jerez y de la zona rural que de forma habitual utilizan esta vía para ir a trabajar, por estudios o simplemente por ocio. La obra, largamente demandada por los afectados, dio comienzo en junio de 2009 y desde entonces las máquinas y los operarios se han alternado en la carretera con los días y semanas de inactividad. San José del Valle, La Barca, Cuartillo, Estella, El Torno, La Guareña, Magallanes, San Isidro y Torrecera son algunos de los núcleos que se verían beneficiados por la finalización de una obra que no tiene visos de retomarse pronto, tras el nuevo parón que ha sufrido. De momento, desde que dieron comienzo los primeros trabajos en la zona tan sólo se han terminado unos pocos kilómetros del tramo que va desde El Chaparrito al cruce con la carretera de Torrecera. Así las cosas, no es de extrañar que vecinos y transportistas se quejen del "lamentable" ritmo de las obras.
La conocida como A-2003 se ha convertido, además, en una vía "cada vez más peligrosa" debido a los trabajos que se realizaron para la ampliación de esta carretera. Por ello, ahora pueden encontrarse al circular tramos a medio construir que suponen auténticos desniveles con relación a la carretera, lo que hace que cualquier descuido puedo provocar que el vehículo se salga de la vía. De hecho, son numerosos los accidentes en esta carretera, aunque afortunadamente no sean de gravedad. Los que peor lo pasan en este caso son los conductores de vehículos pesados como camiones y autobuses debido a la estrechez de la calzada.
Pese a la peligrosidad de la vía, las obras han vuelto a pararse de nuevo sin que desde la Junta se hayan dado explicaciones de qué está ocurriendo. El problema es que, según adelanta el alcalde de La Barca, Alejandro López (PP), las obras no se van a retomar de manera inmediata. "Me reuní hace cuestión de una semana con el director general de la delegación provincial de Obras Públicas en Cádiz y me dijo que hasta marzo o abril del próximo año no van a continuar", afirma el responsable popular. Asimismo, añade que la justificación oficial sobre este nuevo parón es "debido a asuntos que deben solventar Endesa, Telefónica, etc.", según explica Alejandro López, tras el encuentro mantenido en la delegación provincial. Incluso, apunta que la mejora no estará lista hasta 2013, según las nuevas previsiones, a pesar de que comenzó en junio de 2009 y el plazo de ejecución era de 21 meses. Hay que recordar, además, que no es la primera vez que esta remodelación sufre un retraso, ya que ha habido otros debido a la reforma del proyecto y otras dificultades, según alegaron en su momento desde la Junta. De este modo, si finalmente las obras no se retoman hasta finales del primer trimestre de 2012, quiere decir que coincidirá además con una nueva etapa electoral, en este caso por la cercanía de las elecciones autonómicas. Algo que evidentemente hace desconfiar a los afectados ya que "lo dejarán todo para después de las elecciones y si no lo han hecho antes no lo van a hacer después", tal como comenta un agricultor de la zona que circula por esta carretera de forma habitual.
Una circunstancia curiosa, además, tras conocerse semanas atrás que los presupuestos de la Junta para Jerez tan sólo especifican de manera clara que la Junta destinará partidas (aunque no concreta de cuánto dinero) a la iglesia de Santiago y a la carretera de La Barca. Aun así, Alejandro López recalca que "se suponía que el dinero para este obra ya estaba liberado, así que por eso no debería haber problemas".
El alcalde de La Barca reconoce que, a la espera de que se termine esta obra, no cabe duda de que el mal estado de la carretera está repercutiendo negativamente en el Jerez rural y especialmente en esta Entidad Local Autónoma. "Hay mucha gente que evita venir a La Barca porque le da miedo conducir por esta carretera, especialmente si es de noche", apunta López. Igualmente, asegura que el parque de La Suara (ubicado entre La Barca y Torrecera) ha sufrido un descenso de visitantes los fines de semana ya que "muchos prefieren quedarse en el parque de Las Aguilillas para evitar circular por esta carretera". Como consecuencia de todo esto, "se resienten los negocios de la zona, ya que son menos las personas que vienen aquí, y más los que intentan desviarse por otras carreteras como ocurre, por ejemplo, con los que vienen de San José del Valle que prefieren la carretera de Arcos".
Ante este panorama, López advierte que está dispuesto a convocar a sus vecinos a una movilización para que de una vez por todas esta carretera sea una realidad. Se da la circunstancia, además, de que los retrasos en la remodelación de esta vía ya han provocado anteriormente protestas vecinales.
Desde la Asociación de Transportistas de Cádiz, su presidente Antonio Gutiérrez confirma también que la situación de esta carretera supone un "riesgo constante para los conductores de vehículos industriales". De hecho, reconoce que debido al mal estado de la vía "rara es la semana que no hay algún incidente". El principal problema es que la estrechez de la carretera dificulta que dos vehículos de gran tonelaje se crucen "porque casi siempre se rozan los espejos. Si están acostumbrados a pasar pueden evitarlo, pero como no circulen por ahí habitualmente siempre hay algún roce".
Gutiérrez recalca, además, que "mucho me temo que esta obra no acabará hasta dentro de unos años por culpa de la incompetencia de unos incompetentes". Así, tras definir la carretera como "tercermundista" insiste en lo negativo de que esta obra se paralice tanto para el sector como para los vecinos de los núcleos afectados: "Es lamentable, llevamos años denunciándolo". De hecho, añade que desde la Asociación "antiguamente dijimos que había tres problemas: la N-IV, que sigue siendo un problema; la carretera Jerez-La Barca, que sigue igual; y la de Arcos-Paterna, que es la única que ha mejorado". Ante este panorama, el presidente de este colectivo advierte que "la situación empeorará con el mal tiempo y las lluvias, que provocarán que la carretera sea aún más peligrosa".
La conocida como A-2003 se ha convertido, además, en una vía "cada vez más peligrosa" debido a los trabajos que se realizaron para la ampliación de esta carretera. Por ello, ahora pueden encontrarse al circular tramos a medio construir que suponen auténticos desniveles con relación a la carretera, lo que hace que cualquier descuido puedo provocar que el vehículo se salga de la vía. De hecho, son numerosos los accidentes en esta carretera, aunque afortunadamente no sean de gravedad. Los que peor lo pasan en este caso son los conductores de vehículos pesados como camiones y autobuses debido a la estrechez de la calzada.
Pese a la peligrosidad de la vía, las obras han vuelto a pararse de nuevo sin que desde la Junta se hayan dado explicaciones de qué está ocurriendo. El problema es que, según adelanta el alcalde de La Barca, Alejandro López (PP), las obras no se van a retomar de manera inmediata. "Me reuní hace cuestión de una semana con el director general de la delegación provincial de Obras Públicas en Cádiz y me dijo que hasta marzo o abril del próximo año no van a continuar", afirma el responsable popular. Asimismo, añade que la justificación oficial sobre este nuevo parón es "debido a asuntos que deben solventar Endesa, Telefónica, etc.", según explica Alejandro López, tras el encuentro mantenido en la delegación provincial. Incluso, apunta que la mejora no estará lista hasta 2013, según las nuevas previsiones, a pesar de que comenzó en junio de 2009 y el plazo de ejecución era de 21 meses. Hay que recordar, además, que no es la primera vez que esta remodelación sufre un retraso, ya que ha habido otros debido a la reforma del proyecto y otras dificultades, según alegaron en su momento desde la Junta. De este modo, si finalmente las obras no se retoman hasta finales del primer trimestre de 2012, quiere decir que coincidirá además con una nueva etapa electoral, en este caso por la cercanía de las elecciones autonómicas. Algo que evidentemente hace desconfiar a los afectados ya que "lo dejarán todo para después de las elecciones y si no lo han hecho antes no lo van a hacer después", tal como comenta un agricultor de la zona que circula por esta carretera de forma habitual.
Una circunstancia curiosa, además, tras conocerse semanas atrás que los presupuestos de la Junta para Jerez tan sólo especifican de manera clara que la Junta destinará partidas (aunque no concreta de cuánto dinero) a la iglesia de Santiago y a la carretera de La Barca. Aun así, Alejandro López recalca que "se suponía que el dinero para este obra ya estaba liberado, así que por eso no debería haber problemas".
El alcalde de La Barca reconoce que, a la espera de que se termine esta obra, no cabe duda de que el mal estado de la carretera está repercutiendo negativamente en el Jerez rural y especialmente en esta Entidad Local Autónoma. "Hay mucha gente que evita venir a La Barca porque le da miedo conducir por esta carretera, especialmente si es de noche", apunta López. Igualmente, asegura que el parque de La Suara (ubicado entre La Barca y Torrecera) ha sufrido un descenso de visitantes los fines de semana ya que "muchos prefieren quedarse en el parque de Las Aguilillas para evitar circular por esta carretera". Como consecuencia de todo esto, "se resienten los negocios de la zona, ya que son menos las personas que vienen aquí, y más los que intentan desviarse por otras carreteras como ocurre, por ejemplo, con los que vienen de San José del Valle que prefieren la carretera de Arcos".
Ante este panorama, López advierte que está dispuesto a convocar a sus vecinos a una movilización para que de una vez por todas esta carretera sea una realidad. Se da la circunstancia, además, de que los retrasos en la remodelación de esta vía ya han provocado anteriormente protestas vecinales.
Desde la Asociación de Transportistas de Cádiz, su presidente Antonio Gutiérrez confirma también que la situación de esta carretera supone un "riesgo constante para los conductores de vehículos industriales". De hecho, reconoce que debido al mal estado de la vía "rara es la semana que no hay algún incidente". El principal problema es que la estrechez de la carretera dificulta que dos vehículos de gran tonelaje se crucen "porque casi siempre se rozan los espejos. Si están acostumbrados a pasar pueden evitarlo, pero como no circulen por ahí habitualmente siempre hay algún roce".
Gutiérrez recalca, además, que "mucho me temo que esta obra no acabará hasta dentro de unos años por culpa de la incompetencia de unos incompetentes". Así, tras definir la carretera como "tercermundista" insiste en lo negativo de que esta obra se paralice tanto para el sector como para los vecinos de los núcleos afectados: "Es lamentable, llevamos años denunciándolo". De hecho, añade que desde la Asociación "antiguamente dijimos que había tres problemas: la N-IV, que sigue siendo un problema; la carretera Jerez-La Barca, que sigue igual; y la de Arcos-Paterna, que es la única que ha mejorado". Ante este panorama, el presidente de este colectivo advierte que "la situación empeorará con el mal tiempo y las lluvias, que provocarán que la carretera sea aún más peligrosa".
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