viernes, 17 de septiembre de 2010

Asfaltados casi 5 kilómetros de la nueva carretera de La Barca


diariodejerez.es
Dan por seguro que una vez que se acabe el tramo de la recta de la Venta San Miguel se retomarán los trabajos en el entorno del parque de Las Aguilillas


Trabajos de asfaltado ayer a la altura del kilómetro 21 de la remodelada carretera de La Barca a San José del Valle. / pascual
1 comentario0 votosLas obras de acondicionamiento de la carretera de La Barca (A-2003) han experimentado un inusitado acelerón en los últimos siete días, plazo en el que se han asfaltado nada más y nada menos que cinco kilómetros de vía, concretamente entre el puente de la antigua Venta San Miguel y el kilómetro 21. Como es sabido, las obras en cuestión no están exentas de polémica ya que se alzaron voces críticas denunciando tanto que los trabajos estaban paralizados como que estos se iniciaron entre La Barca de la Florida y San José del Valle cuando deberían haber comenzado entre Jerez y la Barca. Las razones de esta postura radican en la peligrosidad de los tramos. No en vano, entienden que la recta donde se han iniciado los trabajos (concretamente entre los puntos kilométricos 21 y 28 de dicha carretera) no es una zona tan peligrosa como la sucesión de curvas que caracteriza la conexión entre Jerez y su pedanía de La Barca de la Florida.

En la actualidad, y según pudo saber ayer este medio de fuentes oficiosas dada la cerrazón a aportar datos de la adjudicataria de los trabajos, la cual es Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), la veintena de empleados que actualmente construyen uno de los carriles de esta vía tienen faena en el lugar durante el próximo mes y medio. Será entonces -si las lluvias otoñales no lo impiden- cuando se pueda considerar construido dicho tramo. No en vano, se considera que aún restan unos díez días antes de que las labores de reasfaltado y de señalización provisional se den por concluidas. Será entonces cuando se abra al tráfico esta parte de la carretera mientras la antigua carretera (por la que estos días se circula) se somete a obras.

Lo que nadie conoce con certeza, aunque se puede intuir, es el lugar por el que se retomarán las obras una vez se concluyan los trabajos en los siete kilómetros ya señalados. Lo más probable, así al menos se entendía ayer en la obra, es que las máquinas se trasladen a las inmediaciones de Jerez, que es donde las tareas de desmonte más se han acelerado, ganando el suficiente terreno a arcenes y campos para que la nueva carretera pueda discurrir sin obstáculos. Será entonces el momento en que vuelvan a tenerse en cuenta "esas actuaciones previas que apenas se perciben desde el exterior" a las cuales se acogió la Consejería de Obras Públicas para explicar el tremendo retraso que padece el acondicionamiento de esta vía de comunicación. Entre dichas labores se encuentra el trasplante de árboles y arbustos protegidos, la tala de los que carecen de valor botánico, las prospecciones arqueológicas, el replanteo de la obra con mediciones definitivas del trazado, el desbroce (que fue especialmente intenso en las lindes del parque periurbano de 'Las Aguilillas') y "la comprobación del terreno natural subyacente", o lo que es lo mismo, comprobar si el firme es lo suficientemente fuerte como para aguantar el intenso tráfico de camiones que afecta a esta vía.

Uno de los grandes problemas a solucionar ha sido elevar la carretera a una altura suficiente que impida que una avenida del río o unas lluvias torrenciales dejen la calzada bajo el nivel de las aguas. No en vano, grandes tuberías atraviesan la carretera para que de esta forma los caudales de agua que allí se acumulan cuando llueve no queden empantanados.

Para los amantes de los datos, cabe destacar que la obra está siendo llevada a cabo por la UTE Jerez-La Barca de FCC y cuenta con un presupuesto de más de 15 millones de euros.

El proyecto recoge el ensanchamiento de la calzada a lo largo de 24 kilómetros entre Jerez y el enlace de la A-389 (Arcos-Medina Sidonia) en El Chaparrito, "de manera que queden dos carriles de 3,50 metros, dos arcenes de 1,50 metros y dos bermas de 0,50. Además se prevé un carril bici de dos metros de ancho por el que se podrán realizar recorridos en ambas direcciones". El ancho total de la vía será de unos 13 metros.

El acondicionamiento de esta carretera -aquejada históricamente por un elevado índice de siniestralidad- beneficiará de forma directa a los habitantes de Estella del Marqués, Cuartillos, La Barca de la Florida, La Guareña, El Chaparrito y Magallanes, y de una forma indirecta al tráfico de vehículos pesados que caracteriza a los negocios de áridos (graveras) instalados desde hace décadas en las inmediaciones del río Guadalete.

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