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La carretera de La Barca registra a diario siniestros de gravedad debido a su peligrosidad, una situación que continuará mientras las obras no avancen. · Autor: Ascen Bonilla
El último accidente mortal registrado en la A-2003, que une Jerez con la Barca de La Florida, después de que un peatón fuera atropellado la madrugada del domingo, ha vuelto a sembrar el desánimo y los nervios entre los vecinos de la pedanía y otras barriadas rurales como Cuartillos y La Guareña que utilizan a diario esta carretera convencional para sus desplazamientos ante la paralización que desde hace meses registran las obras de este vial, las cuales arrastran ya una demora de tres años. Un retraso y una inactividad que no acarrearían demasiados problemas si no fuera porque esta vía interurbana es una de las que más siniestros de gravedad registra casi a diario.
“Aunque los que suelen salir a la luz son los mortales, aquí hay accidentes todos los días, no hay más que visitar los talleres de La Barca, donde están a cada momento recogiendo coches”, señala el alcalde de La Barca, Roque Valenzuela, que no oculta su preocupación por el poco o más bien nulo ritmo, como indica, que caracteriza a los trabajos, sobre todo en el tramo entre Jerez y La Barca, que es el que registra un tráfico más intenso, al contrario del comprendido entre esta pedanía y San José del Valle, que está finalizado pese a ser mucho más tranquilo.
“Desde hace meses, lo único que se ve es a dos operarios trabajando en el paso de los arroyos, lo que para una obra de esta distancia no es suficiente, por lo que a este ritmo llegará el invierno y no se ha habrá hecho nada y volverán a poner la excusa del mal tiempo para parar la obra”, criticó Valenzuela, que tiene claro que en septiembre retomará el curso político exigiendo celeridad para este proyecto.
los vecinos, indignados
Hay que recordar que el pasado mes de febrero los vecinos llegaron a manifestarse para exigir la reanudación de las actuaciones de mejora, dado que la estrechez natural de este vial, que en algunos tramos de obra se ha visto todavía más acusada, unido a un arcén que en algunos tramos desaparece, así como la falta de señalización de determinadas zonas en obras, no hace sino aumentar la peligrosidad que ya de por sí caracteriza a esta carretera, lo cual se hace especialmente palpable cuando dos vehículos pesados confluyen en ambos sentidos. Ante esta situación, en el Partido Popular creen que ante la falta de seguridad con la que se enfrentan los conductores que utilizan la A-2003 a diario, dado que suele canalizar la mayoría de los desplazamientos de la zona rural jerezana, ha llegado el momento de que la Junta de Andalucía ponga sobre la mesa una “fecha tope prevista” y adecue un programa de trabajo y de presupuesto para que la obra no acabe “eternizándose”, como así entienden que está ocurriendo actualmente. Como señala Antonio Saldaña, concejal del PP, no se trata de una cuestión exclusivamente de confort, sino de prevención ante el alto riesgo de siniestralidad en el que se está incurriendo antes y durante los trabajos. “A estas alturas nadie sabe cuando van a finalizar las obras y en estos casos, como en todos, sabemos que se trata de una cuestión puramente económica y la reivindicación de los vecinos no es ni mucho menos un capricho”, critica.
De hecho, tal como explica Saldaña, la situación de la A-2003 se ha convertido en los últimos meses en un tema “recurrente” para los diputados populares, como así evidencian las insistentes preguntas que han trasladado tanto a la Diputación provincial de Cádiz como a la Junta de Andalucía. Asimismo, poco antes del verano hubo una asamblea organizada por el representante del PP, Antonio López, donde volvió a ponerse de manifiesto la preocupación e indignación vecinal.
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